sábado, 17 de diciembre de 2011

Hoy

Hoy no tengo ganas de nada. No tengo ganas de hablar, no tengo ganas de sentir, no tengo ganas de llorar. Quiero mandar al mundo para la mierda.

Pero estoy buscando con quién hablar, estoy sintiendo de todo y estoy llorando. Y como la más idiota estoy esperando que el mundo se de cuenta de que acá estoy.

Mal día ayer, mala semana, mal mes. Mierda de año.

Yo pensé que ya se había acabado la montaña rusa emocional, o por lo menos que había disminuido a un nivel manejable. Y ¡zas! me mete gol de horqueta. Vuelve el dolor, el odio, el abandono, la ira, el vacío, el miedo, el apego.

Estoy cansada de extrañar y esta semana no pinta a que mejore. Otra Navidad a la mierda. Tan valiente que estaba, jugando de macho pensando que me iba a mantener fuerte y no me iba a joder tanto y acá estoy otra vez. Qué cansado con el dolor. Qué cansado conmigo.

La facilidad con que la gente lo trata mal a uno. La chicha de otra vez ser sensible a eso, exponerse es una mierda y por eso no me da la gana exponerme.

¿Qué te hiciste desapego? Jueputa momento escogiste para desaparecer.

Después preguntan por qué me encuevo. ¡Porque la gente está loca! ¡Porque yo estoy loca! Y los cuerdos se cansan de tener tanto loco a su alrededor. No los culpo. No me culpen. Exponerse es demasiado riesgo, es agotador. 

A veces una cree que es alguien, un algo en particular para la gente, te acomodás en el sofá y te acostumbrás a la compañía y a la atención. Después te la quitan ¿Para qué putas abren la puerta y te invitan a pasar? ¿Para qué putas la abrís vos? A veces soy una bestia, una bestia desechable.

Fuck off. Hagan un hueco y se entierran.

Según yo el mundo debería de funcionar diferente, la gente debería de ser más amable con los demás, más considerada con los sentimientos, el mundo debería de ser un lugar más honesto, las mamás deberían de enseñarle a sus hijos a ser buenos amigos y buenas parejas.

No me toca cambiarlo. El mundo es como es y no se deja cambiar. Se me acabó la voluntad por querer hacer algo significativo, la gente vive perfectamente bien sin mi ayuda y el mundo sigue girando aunque yo deje de darle pelota o de escribir.

Este es un mal post.

m.

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