Conversaciones IX

Más de estas.

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-Al final siempre nos amaneció.

-Sip. Amanecer así siempre me recuerda la primera fiesta de graduación a la que fuí. Yo estaba en noveno y tenía un novio en onceavo, después de la fiesta nos fuimos todos a la casa de una chavala de su generación, no era guarera, sino como para seguir celebrando y terminé llegando a mi casa a las 6am en mi vestido elegante y con los zapatos de tacón en la mano, pero feliz. Fue la primera vez que me sentí adulta y dueña de mí misma. No sé, cada vez que veo amanecer me siento más viva.

-Sí, es chiva. Eso que uno está cansado y amanece pero no se quiere dormir.

-¿Que está demasiado cansado para dormir?

-No, que nada más no quiere dormir.

-Ah.

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-Nombres, yo no creo que haya nada después de la muerte.

-¿No?

-No.

-¿Entonces? ¿Según vos qué pasa?

-Nada. Nos morimos y ya. Antes creía en la reencarnación, pero ahora creo que es mucho menos complejo que todo eso y que no existe nada después. No creo que haya un ente supervisando este o cualquier mundo, no creo en un creador ni en deidades con poderes sobrenaturales que saben cuál es nuestro destino y lo pensaron antes de que naciéramos. Me parece muy narcisista creer que somos el centro de atención de algo o alguien. Pero a mucha gente le da tranquilidad creer que sí, entonces todo bien por ellos.

-¿Entonces no creés en el alma y el cielo y esas varas?

-No. Para mí lo que todos conocemos como alma es una energía viva y para mí esa alma o energía es parte de un todo. Todo lo vivo la tiene: el planeta, las plantas, los animales, todo. Y por eso estamos jodidos como humanidad, porque estamos en guerra contra las varas que deberían de ser más importantes para nosotros porque nos rehusamos a ver que somos parte de lo mismo, ¿quién putas bombardea, contamina y gasta su propio hogar? así de locos estamos. No sé si habrá un orden natural de las cosas, pero la naturaleza es sabia, tiene una estructura increíble y se adapta, sana y se regenera, busca balance y armonía, es increíble. Nuestra capacidad para manejar esa naturaleza es también impresionante y en vez de usar el razonamiento para tomar decisiones consecuentes vemos al planeta como una fuente de recursos para nuestro beneficio y ya cuando pensamos en todo con un fin utilitario estamos mal. ¿Quién le vendió el cuento al hombre de que todo en el planeta está para servirnos? No sé de dónde sacamos la soberbia, pero esa actitud condenó al planeta y a todo lo vivo en él hace siglos.

-Aaaaaajá. Tan mística vos.

-Qué bobo que sos, pero dejáme terminar, carajo, que tiene sentido. Bueno, sentido para mí. Bueno, dejáme terminar, joputa sal. Entonces estamos en guerra con el planeta porque juramos que todo está ahí para servirnos como nos dé la gana y el interés propio es más importante que todo lo demás. Mientras no tratemos al planeta y a los demás seres vivos con respeto nunca vamos a evolucionar, por eso llevamos milenios igualiticos, tendremos más juguetes y tecnología, pero incluso con todo lo que ahora sabemos en esencia seguimos siendo el mismo ser humano desde que caminamos erectos. No te riás, idiota, a vos no se te puede decir nada.

-Bueno bueno, seguí.

-Entonces, cuando uno se muere, esa energía viva no deja de existir, lo que ya no es más es solamente el cuerpo físico, la energía se transforma y se mezcla con la demás energía viva que hay en los demás seres vivos, en las plantas, animales, el planeta, todo. Se convierte en una sola. Tal vez por eso la gente siente a sus muertos presentes o que se despiden, yo sentí a mi hermano al día siguiente que murió. Pudo ser que mientras pasaba por ese proceso buscó energía familiar para él. Mi hermana sintió a mi bisabuela cuando ella murió, es lo mismo. Tal vez los espíritus chocarreros son esa energía que no se disolvió bien ¿quién sabe? y a final de cuentas ¿qué importa? Los muertos ya no están de una forma compatible con la nuestra y eso es lo que duele y lo único que realmente importa, el resto son detalles y cada quién se compra el cuento que le da paz. La vara es que esa es mi explicación y puedo estar completamente equivocada pero para mí tiene sentido y nadie me puede decir con certeza que así no es porque no nos enteramos hasta que nos morimos, entonces nada, hay que morirse para saber, la torta es que no le podemos contar a nadie.

-Tenés que ir más a misa vos. O a la romería, no sé.

-Jodás.

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m.